Moldes de inyección de aluminio

Cuando se han generado los programas específicos con todas las operaciones, son lanzados a la maquinaría fresadora de control numérico correspondiente para que sean ejecutados. Este proceso de matricería es largo y tedioso debido a que la maquinaria fresadora no puede llevar a cabo una programación infinita para la realización de la matriz. En función de lo que ocupen los programas, podremos enviar más o menos operaciones.

Antes de comenzar el mecanizado de la matriz es imprescindible la fijación de la pieza. En matricería es muy importante tener la pieza a mecanizar anclada a la mesa de trabajo sin posibilidad de movimiento.

Una vez amarrada bien la pieza a la mesa y los programas preparados para ser admitidos, hay que localizar el origen de la pieza. Introducimos el origen con las coordenadas del punto exacto que queremos.

Se empieza la mecanización con aspiradora de viruta para poder observar convenientemente las geometrías de la pieza. Si algo no saliera como queremos, tendríamos que interrumpir el proceso y analizar la situación. Se le incorpora agua para evitar el desgaste y las imperfecciones que pudieran originarse debido a un sobrecalentamiento. Contamos con centros de mecanizado CNC, electroerosión por penetración y programas de CAM, necesarios para afrontar moldes de gran dificultad, obtener la máxima precisión y el mejor rendimiento en todo el desarrollo del molde de acero. Así ofrecemos con todo nuestro equipo técnico y humano, moldes con el conveniente acabado y los plazos estimados.

Una vez fabricadas, las piezas que conforman el molde se ensamblan para comprobar su viabilidad. En el proceso de mecanización se pueden producir imperfecciones, por lo que es fundamental tener sistemas de diagnóstico eficaces para que estas anomalías puedan ser corregidas. Nuestras prensas tienen un tamaño de 2500 por 1500, para poder cubrir convenientemente las necesidades de tamaño de nuestros moldes.

En una posterior fase de ajuste, se procede al pulido. Se perfecciona y se acaban las piezas del molde para que no hayan defectos en la creación de piezas posteriores. Comprobamos las medidas de las huellas del molde, procediendo a su pulido, montaje y comprobación final del mismo.

Gracias al proceso del moldeo por inyección se puede fabricar a bajo coste infinidad de productos con tamaños y formas diversas que sería muy difícil conseguir en otros procesos de fabricación. Con una buena matriz para obtener piezas, podemos tener resultados muy precisos y trabajar materiales muy comlejos.

Gracias al alto ritmo de producción, bajo coste, diseño, precisión 3D, buen acabado superficial y capacidad para reproducir pequeños detalles, la matricería se ha convertido en el camino por el que se opta para la producción de múltiples productos. La producción del molde nos ofrece una precisión dimensional extraordinaria, con una calidad superficial que generalmente no requiere un mecanizado posterior, salvo un ligero desbarbado, operaciones de taladro y roscado de orificios.

Entre sus inconvenientes se encuentra la dificultad de fabricación de la matriz. Necesita de maquinaría sofisticada a la altura de la exigencia de los proyectos actuales. Hoy, con los avances tecnológicos ha dejado de ser un inconveniente, pues los acabados superficiales de las piezas obtenidas necesitan menos mecanización, gracias a la excelente preparación del equipo humano multidisciplinar y a la calidad de las máquinas que se emplean en la obtención de la matriz. Con los nuevos sistemas de diagnóstico, somos capaces de detectar pequeños defectos en las superficies interiores del molde.

Los materiales más empleados para la producción de moldes de inyección mediante estos procesos son el acero. Generalmente empleamos acero pretemplado que garantiza un óptima resistencia y tenacidad mecánica. En inyección de aluminio se utiliza acero de alta resistencia a la fatiga térmica.

El automóvil es, en la actualidad, el principal cliente de la industria auxiliar. Bombas de agua, tapas de balancines, soportes de motor, frenos y un sinfín de componentes necesitan matriceria para su fabricación.

La iluminación técnica necesita diversas piezas fabricadas mediante el proceso de moldeo e inyección de aluminio.
Carcasas, soportes, difusores de calor, son algunos ejemplos de piezas realizadas por nosotros.

Si una pieza se puede obtener mediante un molde, nosotros podemos hacerla. Tenemos amplia experiencia en diversas ramas de la industria para poder satisfacer sus necesidades.

Reductores, palancas, pasos de gas, codos, tensores o cualquier pieza que nuestros clientes puedan necesitar.